Existen numerosas versiones de trampas adhesivas en el mercado, de diferente forma, diseño, tamaño y capacidad. El diseño y color pueden ayudar a atraer a los insectos. Se utilizan con una sustancia para atraer los insectos seleccionados y equipados con un adhesivo en la superficie interior para atrapar y capturar bien al insecto una vez haya entrado en la trampa. Las más adecuadas para cucarachas son aquellas diseñadas en base a su biología y ecología.

Sean como sean, todas las trampas adhesivas tienen en común unos requisitos:

• Un cebo efectivo que los atrae dentro de la trampa.

• Aseguran y retienen al insecto una vez en el interior.

• Son seguras y compatibles con el medio en que se usan.

• Son fáciles de utilizar.

• Poseen una vida útil práctica y económica.

• Tienen una vida útil adecuada.

El diseño permite que puedan ser deslizadas bajo maquinaria y equipamiento –cocinas, neveras, congeladores y maquinaria para la alimentación siendo ideales para industrias alimentarias.

Las trampas en general explotan el instinto natural de los insectos de explorar las pequeñas oberturas que pueden ofrecer un cobijo seguro, y las cucarachas no son una excepción. La cucaracha germánica es conocida por preferir huecos para cobijarse de unos 5mm. Las trampas para cucarachas están diseñadas para atrapar un número de especies, desde la gran cucaracha americana o la relativamente pequeña cucaracha germánica. Así pues, las dimensiones de la trampa y su punto de entrada están diseñadas con un compromiso en mente.

Las trampas más grandes son más adecuadas para el control de plagas cuando la infección es grande y móvil, pero cuando las poblaciones son pequeñas y discretas, o cuando se necesita una simple respuesta a si hay o no cucarachas, es preferible un gran número de trampas pequeñas. Esto reclama la extra sensibilidad de las trampas pequeñas como la “Detector”, una trampa pequeña adhesiva diseñada para detectar la localización exacta y el cobijo de la infección de cucarachas. Son ideales para ponerlas en el interior de maquinaria –pequeños compartimentos, cajas y pequeños huecos y espacios. Su forma angulada asegura una colocación perfecta en el suelo y juntas de pared. El cebo de las trampas de cucarachas está formulado como tabletas atrayentes y contienen atrayentes de grado alimentario, activos contra las 3 grandes plagas de cucarachas interiores –germánicas, orientales y cucarachas americanas.

Una vez se obtienen las capturas de insectos, los técnicos proceden a identificar y describir la infestación. Bajo el ojo desentrenado es fácil confundir las diferentes especies de cucarachas.

Las infestaciones de cucarachas normalmente ocurren en situaciones sensibles donde no se quiere utilizar plaguicidas si no es realmente necesario. Si no hay presente ninguna infestación entonces no es necesario ningún insecticida, especialmente si hay evidencias de que el producto del propietario no funciona correctamente.

Si la infestación está identificada, entonces es necesario un control. Identificar el cobijo y el aprovisionamiento de alimentos puede conseguirse eliminando los pocos insectos de una plaga reciente, aspirando o a través de otros medios. El uso de trampas adhesivas de gran capacidad puede ser una opción, especialmente en situaciones muy sensibles donde los biocidas químicos no se permiten como en laboratorios médicos, hospitales, viviendas donde hay enfermos y protectoras de animales, que no pueden ser trasladados.

En caso de una aversión generalizada o miedo, las trampas adhesivas pueden tener aplicaciones de control más amplias. Es mejor utilizar una trampa adhesiva con atrayente en ciertos casos para que una vez la cucaracha sea atrapada, esté asegurada y controlada.

El tratamiento químico sigue siendo la única manera de combatir rápidamente grandes infestaciones. A no ser que las trampas adhesivas sean utilizadas después de un tratamiento, no hay manera de saber si se ha conseguido el objetivo de “plaga cero” en cucarachas. Una vez usadas, continuamente usando esta simple pero efectiva y relativamente económica herramienta de control de plagas, permite una identificación más rápida de nuevas infestaciones, y de este modo minimizar el peligro y el gasto de un control químico regular.